Derrotar al espíritu del conflicto

Derrotar al espíritu del conflicto

Vivimos momentos de desconcierto, de inseguridad, de gran vulnerabilidad debido a las consecuencias devastadoras que dejan tras de sí, tifones imprevisibles que cabalgan en todas las direcciones, arrasando todo a su paso. Miles de hombres, mujeres y niños se despiertan bajo violentas ráfagas de armas, bajo feroces discursos de mentiras y de opresión, sin saber qué hacer ni a dónde ir.

Muchos gobernantes esconden, bajo su grito de justicia y de libertad, sus ansias de poder para someter al pueblo, arrebatando a los ciudadanos sus derechos y privilegios. Son bestias negras que vician el aire con la injusticia y la opresión, y, ese aire viciado, cabalga como un tifón sin dirección, creando un escenario violento, cuyo fanatismo tiene consecuencias muy graves para todos. No sabemos cómo pueden reaccionar las personas que viven en el pánico. Esto debería tenerse en cuenta.

La Humanidad entera —la excepción hace la regla— desea vivir en serenidad, tener un trabajo que les permita vivir dignamente y disfrutar del día a día junto a sus familias y amigos. Urge detener la desmesura de violencia y de sangre y para ello es necesario un cambio de actitud para crear un mundo nuevo y mejor, construido sobre los cimientos de la paz, la justicia y el respeto, enterrando para siempre la venganza y la violencia.

La paz es responsabilidad de todos, solo en la paz el espíritu del conflicto será derrotado.

La Caja de Pandora y la Globalización

La Caja de Pandora y la Globalización

Cuando abrimos nuestra Caja de Pandora, consciente o inconscientemente, no tenemos ni idea de su contenido ni de sus consecuencias, a pesar de que todo lo que contiene nos pertenece: recuerdos, traiciones, secretos y experiencias, así como las armas empleadas: mentiras, manipulaciones, comportamientos violentos, etc.

Antes de abrirla debemos asegurarnos de que estamos preparados para el perdón, perdón hacia nosotros mismos y hacia los demás y que poseemos valentía y sabiduría para evitar devastadoras explosiones nucleares en nuestras vidas.

En estos sombríos momentos de la Historia de la Humanidad, la Caja de Pandora que cada país guarda, está llena de conflictos internos y externos, de pobreza, de miseria, de crisis económica, social y climática y los gobernantes siguen ignorando sus graves consecuencias para la humanidad y el planeta: éxodo y muerte, conflictos entre países por la supremacía provocando injusticias y destrucción entre todos los seres vivos.

La globalización nos acerca a todos y todos los países están involucrados en esta terrible espiral de violencia en la que todos los seres humanos estamos implicados. Creemos que la violencia es el arma más adecuada, directa y radical que existe para arreglar problemas rápidamente, pero la verdad es que la violencia siempre obtiene resultados temporales y deja a su paso estelas de ruinas y devastación, cicatrices que nunca dejaran de supurar. Como decía Gandhi: “el odio es como el ácido que corroe el recipiente que lo contiene”.

No es el momento de abrir la Caja de Pandora de ningún país, sino de exigir compromisos de todos los países integrantes en el planeta para crear un mundo mejor y erradicar la violencia, la injusticia, la esclavitud. No solo debemos luchar por todos los seres humanos, sino también por un planeta sano y verde, luchar contra la contaminación y ayudar para que el cambio climático minimice su daño y no se cobre millones de vidas.

Científicamente, se ha comprobado que el Amor es una energía muy poderosa para crear transformaciones positivas, como la paz, que trae justicia, respeto y progreso.

La esperanza es la fuerza del amor que nos impulsa a seguir luchando por la paz para construir un mundo mejor en este planeta nuestro.

Imagina…

Imagina…

Como decía Albert Einstein: “La imaginación es más importante que el conocimiento”. La fuerza del pensamiento es infinita, así como la energía, por lo tanto, podemos transformar nuestro micro universo.

Imagina que tus pensamientos vuelan hacia las alturas y descansan en las blancas nubes cargadas de paz y serenidad, para luego caer en forma de lluvia y regar la tierra con armonía y bondad.

Imagina que esa lluvia de corazones alivia a la malherida Madre Tierra y sana a hombres, mujeres y niños que sufren sed y hambre, porque la tierra se ha roto de tanta polución, radiación, mareas negras y basuras que no dejamos de tirar en el mar y en la tierra.

Imagina un gobierno en el que todos sus representantes sean hombres y mujeres de honor, luchando por un solo objetivo: la paz y la unidad; donde la justicia sea igual para todos, dónde todos los países sean aliados y busquen apoyos, en lugar de diferencias, para erradicar las armas y el yugo de la violencia o de la esclavitud.

Imagina que la religión, pilar de millones de seres humanos, baje sus armas y se una a la verdad del Amor. Amor desinteresado y sin apegos, Amor sin color ni sexo, Amor sin fronteras, Amor incondicional a la naturaleza y a los seres vivos.

Imagina que todos los seres humanos forman una nación, la Humanidad, cuyos lazos brillan en el universo, caminan mirando de frente hacia su destino, cada uno diferente pero movidos por la fuerza del perdón, la solidaridad y el amor.

Imagina que los bosques y selvas crecen y nos traen aire fresco, alejando enfermedades y muertes causadas por la amputación de millones de árboles.

Imagina a los animales viviendo sin miedo porque ya no pueden ser mostrados como trofeos.

Imagina que el sol, que cada día nos da vida con su luz, nos entrega sus caricias para que la humanidad pueda sentir el calor de la pasión sin miedo a la violencia ni a la humillación.

Imagina que las estrellas y la luna nos arropan con su luz para que la noche oscura se ilumine y no sintamos miedo ante las sombras que nos acechan.

Imagina, imagina, imagina… pero siempre en positivo para establecer un vínculo de armonía para que la vida sea alegría.

Mahatma Gandhi decía: “La felicidad se alcanza cuando lo que uno piensa, lo que uno dice y lo que uno hace está en armonía”.

 

 

 

Me siento bien por aceptar ser quien soy

Me siento bien por aceptar ser quien soy

He comprendido que sentirme bien, es aceptar quién soy, es hacer lo que tengo que hacer y hacer lo correcto, es estar donde debo estar, es tomar las decisiones que tengo que tomar, es luchar y crear y seguir avanzado…

¡ME SIENTO BIEN!

Me gusta mirar a mi alrededor y ver caras sonrientes, serenas, ojos llenos de bondad y alegría, oír el bullicio de la risa, ver como dos personas se cogen de la mano y se besan con ternura y amor, me gusta oír la risa de niños y mayores.

Me siento bien al poder beber el agua clara del río, ver la luz del sol sobre las montañas, oír el canto de los árboles y el coro de los pájaros, me gusta respirar el aire puro, libre de contaminación y me gusta comer alimentos sanos.

Me gusta decir gracias con el corazón y esto me hace sentir bien; es importante sentir gratitud en nuestro ser y no actuar como autómatas o robots, las palabras bellas salen del corazón y nunca se desgastan, al contrario, cobran vida y las personas que las oyen sienten sus energías, ya que su mensaje es de corazón a corazón. Esforcémonos por decir cosas bellas que salgan del corazón, cuantas más mejor, así reconoceremos que nuestro pequeño universo y nuestra vida están hechos con agradecimiento y comprensión.

Me siento bien porque cada vez que me caigo siento la fuerza latente y mágica de mi interior que me ayuda a levantarme y me hace avanzar, siento ese “DESEO” de luchar por conseguir mis objetivos, mis sueños; siento que algo se transforma en mi interior cuando me levanto porque me he caído y sigo avanzando; esa transformación es como la vibración de una gota de agua que cae en un lago en calma y se expande y expande formando ondas, esa vibración es la que me ayuda a crear mi vida, a crear una vida con ventanas abiertas al infinito, una vida que me permite oír el canto de las estrellas, el susurro de los árboles, ver la luz de las montañas y la belleza del agua, ver y sentir los ojos alegres de la bondad de las personas que me rodean.

Me gusta sentir cómo las personas están en la acción y no en la reacción, sé que hay mucho trabajo por hacer, pero cada día tomamos más consciencia de nuestra responsabilidad y de sus efectos tanto en nosotros mismos como en los demás; cada día luchamos con serenidad y fuerza por la paz y la armonía, por la libertad y la tolerancia, desear un mundo mejor ya no es una utopía, y esa energía de gratitud es la que hace que nuestras acciones sean positivas y tengan una repercusión provechosa para nosotros y para toda la humanidad.

Me siento bien por tener la libertad de poder decir las cosas, al no tener miedo o reparo y a decir gracias. Todos podemos expresar lo que sentimos con respeto, ya sea a través del arte, de las palabras, de ONG, de gobiernos, de religiosos…, todos debemos unirnos y decir “GRACIAS A LA VIDA” porque estamos aquí y porque tenemos en nuestras manos el poder de cambiar nuestras vidas y luchar para conseguir nuestros sueños, no podemos volver a enterrarlos en el baúl olvidado del desván.

La vida es transitoria, todo tiene un comienzo y un final, en medio hay una sucesión de acontecimientos, de situaciones, de experiencias que forman nuestra vida, tenemos que acostumbrarnos a vivir en el presente, en el ahora, cada día al máximo, luchando por cambiar aquello que no queremos, con respeto y sin venganza. Vivamos con alegría serena nuestra vida, luchemos en acciones positivas, buscando soluciones y no rupturas, no seamos egoístas pensando solo en nuestras pequeñas historias, seamos una HUMANIDAD con un solo objetivo común, VIVIR EN PAZ Y LIBERTAD.

Solo la unión de todos nosotros “UNO PARA TODOS Y TODOS PARA UNO” ayudará a crear un mundo donde la compasión, el respeto, la tolerancia, la paz y la libertad sean los colores de nuestra bandera, no dividamos más para que algunos venzan, la unión hace la fuerza.

Me siento bien de poder compartir contigo mis palabras, me siento bien de poder vivir y respirar el mismo aire que tú y me siento bien porque todos nos necesitamos para crear la gran obra de teatro que es nuestro futuro. ¡GRACIAS!

Unidad frente a división

Unidad frente a división

Hay hombres y mujeres que hablan de división y no de respeto ni de libertad, son como cohetes que queman el combustible de su nave que va hacia ninguna parte.

La abajo firmante quiere declarar que la vida debe ser vivida, que los sueños deben realizarse, que la meta de todo ser humano es ser feliz.

Son palabras, palabras y palabras cargadas de sentidos y verdades, debemos saber que tenemos el derecho de vivir en el país donde hemos nacido, donde las costumbres, la lengua, la idiosincrasia, forma parte de nosotros y nos da alas para ir hacia donde tenemos que ir, no ser exiliados o vivir en campos de refugiados o en otros países porque hay personas que promueven la división.

En un país donde la unidad es la fuerza, aunque se vivan caminos divergentes, todos tienen derechos, derechos a la democracia y a vivir con respeto, en cambio, si vivimos en un país donde se proclama la división, los derechos dejan de existir trayendo graves consecuencias para todos.

Ya de por sí la vida en la tierra es caótica, no se puede prever las consecuencias de la violencia, ya sea de palabras o acciones y, aun así, estamos a la merced de unos individuos que en lugar de buscar soluciones se comparan unos a otros envenenando el aire que respiramos, asustando a una parte de la humanidad que no sabe a quién creer y no confía en nadie.

Para tener un mayor control sobre las personas se crean guerras frías y calientes y muchos pensamientos oscuros de una época sombría de ignorancia y de crueldad afloran como si fueran sombras que se ciñen sobre nuestras vidas, sintiendo sus garras en nuestra piel, y reabriendo viejas heridas una y otra vez que jamás cicatrizarán.

Tras un periodo confuso y dividido, promovido por los que quieren vencer, manipulando y mintiendo, renace otro en el que la esperanza y la paz son los puntos de anclaje de la nueva bandera de la unión, solo así encontraremos la fuerza para luchar por un mundo mejor donde la tibieza de algunos se perderá y solo será un mal recuerdo.

La unión es la panacea para esa enfermedad llamada división y poder crear un mundo mejor en la paz, la justicia, la libertad, los derechos humanos y el respeto.

 

Marinero

Marinero

Olas rotas que traen espumas,

Gaviotas que hacen cabriolas,

Ojos melancólicos y húmedos que

Sueñan con volver a surcar las aguas

De ninguna parte.

 

Marinero, no estés triste,

Has surcado océanos de la vida,

Y has sido feliz en tus mares,

Amores y sacrificios, tempestades y calma.

 

El ancla solo te permite soñar

Sentado en la roca con tus recuerdos,

Mirando el horizonte de tus deseos.

 

Soplan vientos de libertad

Que sientes en tus adentros.

 

El ancla de tus sueños se ha levantado,

Las olas suaves acogen tu barca,

Atrás queda la espuma de las olas rotas…

 

A la luz del sol moribundo

Decía adiós nuestro marinero…

(foto de la red)